Verduras en el hormigón, y no es una broma

Verduras en el hormigón, y no es una broma

El hormigón es un material muy utilizado en los proyectos de obra civil en Lleida gracias a los excelentes resultados que ofrece. Sabemos que este material está compuesto por una mezcla de cal, cemento, arena, agua y gravilla. También podemos encontrar el hormigón armado que está reforzado por una armadura de barras de hierro o acero para que cuando esté fraguado pueda absorber los diferentes esfuerzos de tracción a los que queda sometido. Pero... ¿y si al hormigón se le añaden verduras?

¿Verduras en el hormigón?

Sabemos que la vida útil del hormigón armado es de unos 100 años, momento en el que suelen aumentar sus costes de mantenimiento dado que pueden aparecer grietas y el metal del interior se puede haber deteriorado. Se han hecho muchos estudios para intentar hacer que dure más tiempo y según las observaciones, lograrlo puede ser más fácil de lo que parece: Con verduras.

No, no es una broma, recientes estudios han demostrado que se podrían utilizar nanoplaquetas creadas a partir de zanahoria y remolachas. Un grupo de científicos de la Universidad de Lancaster, comandado por el profesor Mohamed Saafi demostró que sus nanoplaquetas permiten obtener el mismo nivel de resistencia ahorrando hasta 40 kilos de cemento Portland por cada metro cúbico de hormigón.

Con la inclusión de estas nanoplaquetas, se aumenta la densidad de la microestructura del hormigón, lo que provoca una mayor resistencia al paso del tiempo, haciendo que tenga unas mejores características y también que dure más de esos 100 años aproximadamente de vida útil que tiene uno de los materiales más utilizados en la construcción.